Los cepillos de cerdas de jabalí se llevan usando desde la antigüedad, hace más de 200 años, y han sobrevivido hasta hoy, el motivo es simple, tanto para el cabello, como para la barba, no tienen rival.
Mientras que materiales sintéticos como el nailon, plásticos y similares, pueden causar electrostática (que deriva en encrespamiento), irritaciones y daños en el cabello, las cerdas de jabalí se comportan de forma respetuosa, tanto con el pelo como con la propia piel.
La clave se esconde en un conjunto de características de este tipo de cepillos, por un lado la longitud desigual de cada cerda y la agrupación de las mismas, siendo un cepillo con mucha densidad, de forma que llega a todos los pelos, incluso aquellos más pequeños. Esto unido a la peculiar flexibilidad de la cerda, así como su composición natural, hacen que sea el aliado perfecto sea cual sea el tipo de cabello o barba.
Más hidratación y brillo
Una tarea tan normal como lavarnos la barba o cabello se convierte en una acción más dañina de lo que creemos, al hacerlo estamos eliminando todos los aceites naturales de nuestro pelo, aquellos que se encargan de mantenerlo sano e hidratado de forma natural.
Los cepillos de cerdas de jabalí permiten recuperar de nuevo el sebo que se concentra en los poros y distribuirlo desde la raíz a las puntas, para recuperar la hidratación del cabello o barba, en consecuencia, el pelo luce con un brillo natural, hidratado y se mantiene más fuerte.
Menos roturas, encrespamiento y puntas abiertas
Al mantener una mejor hidratación del vello y piel, así como lograr que la distribución del sebo sea homogénea, se logra un pelo más fuerte, menos roturas y puntas abiertas.
Otra consecuencia del uso regular de este tipo de cepillos es que ayudan a combatir el encrespamiento.
Exfoliación natural
Las cerdas permiten realizar un suave masaje sobre la piel, sin dañar o irritar, este masaje provee de un método de exfoliación natural, eliminando con suavidad las células muertas y previniendo en consecuencia problemas derivados como rojeces o acné.
Adiós a los picores
Al recuperar la hidratación natural en pelo y piel, combinado con la exfoliación que se produce en la última, conseguimos además reducir e incluso eliminar los molestos picores que se producen bajo la barba o cuero cabelludo.
Puede ayudar a promover un crecimiento más rápido del cabello
En la velocidad de crecimiento del cabello o barba no existen milagros, pero si es cierto que la estimulación del riego sanguíneo se asocia a un crecimiento del cabello más sano, fuerte y rápido (es por ello que muchas terapias de recuperación del cabello incluyen estimulación y masajes de varios tipos en las zonas afectadas).
Por medio de los cepillos de cerda de jabalí se logra de forma suave, masajear la piel que se esconde tras el pelo, mejorando la circulación de la misma.
